GUÍA DE RECURSOS MEDIÁTICOS: PALESTINA / ISRAEL
Actualizado el 7 de octubre de 2023
La Asociación de Periodistas Árabes y de Medio Oriente (AMEJA, por sus siglas en inglés) ha creado una guía para ayudar a las salas de redacciones a cubrir asuntos sobre Israel y Palestina de forma más precisa y crítica.
Esta tarea se realiza en respuesta a las solicitudes de reporteros, editores y productores, muchos de los cuales son miembros de AMEJA, que piden recursos para comprender mejor el contexto y matices históricos.
Esta guía fue creada con la contribución de periodistas miembros de todo tipo de plataformas mediáticas de todo el mundo. NO es una lista completa de directrices y recursos. AMEJA espera que estas recomendaciones vayan evolucionando conforme se produzcan los acontecimientos.
AMEJA insta a todo el que cubra esta noticia a:
● Recordar el contexto general de las relaciones entre Palestina e Israel y cómo se vinculan con los acontecimientos que se están cubriendo actualmente. Todo reportaje debe tomar en consideración que, de acuerdo a la ley internacional y el consenso generalizado, Israel ocupa territorio palestino, y los palestinos, ya sea que habiten en Cisjordania, Gaza u otra frontera de Israel reconocida internacionalmente, están sujetos a un sistema desigual e injusto, según lo documentado por organizaciones internacionales como Human Rights Watch y la organización de derechos humanos israelí B’Tselem.
● Tener también en cuenta el contexto actual. Por ejemplo, en los meses anteriores a los ataques que perpetró Hamás en Israel en octubre del 2023, la milicia israelí hacía redadas de rutina en ciudades palestinas de Cisjordania como Yenín, Tulkarem, Nablus, Hebrón y otras, donde mataron y arrestaron a combatientes y civiles por igual, además de que confiscaron sus tierras. Los colonizadores israelíes en asentamientos considerados ilegales de acuerdo a la ley internacional, han hostigado y atacado a agricultores palestinos y sus familias con impunidad. Los términos como “ataque no provocado” normalmente ignoran acontecimientos previos.
● Evitar perspectiva de “ambas partes”. Reconocer el desequilibrio de poder entre Israel y el pueblo palestino. Este no es un conflicto entre estados sino más bien entre Israel, que tiene uno de los ejércitos más desarrollados del mundo, y los palestinos, que no tienen un ejército formal y usan principalmente armamento relativamente básico e improvisado.
● Tener precisión en su reporte de víctimas. Evitar reportar encabezados o introducciones como “Más de 30 muertos en Gaza e Israel mientras la lucha escala rápidamente”, si, por
ejemplo, se tiene conocimiento de que la mayoría de las víctimas eran palestinos en Gaza. Informen a los lectores sobre quiénes resultaron muertos o heridos, dónde y por quién, utilizando voz activa en vez de pasiva.
● Tomar consciencia sobre el continuo bloqueo de Israel en Gaza. Mientras que Hamás es el partido político que gobierna en el territorio, Israel sigue controlando las fronteras de Gaza y el movimiento de personas y bienes mediante un bloqueo continuo por aire, mar y tierra, con Egipto controlando el cruce en Rafah.
● Remplazar “desalojo” y “conflicto de bienes raíces” con “expulsión”. Los términos “desalojo” y “conflicto de bienes raíces” indica un desacuerdo entre dueño e inquilino, ocultando los intentos del gobierno israelí de desplazar por la fuerza a la población palestina de Jerusalén. En el caso del barrio Sheij Yarrah y otros territorios palestinos ocupados, las Naciones Unidas han comentado que dichas expulsiones son una “violación de las obligaciones de Israel ante la ley internacional”.
● Evitar la palabra “choque”, en favor de una descripción más precisa. Pensar dos veces antes de describir confrontaciones entre protestantes palestinos y la policía fuertemente armada de Israel como “choques”. Las confrontaciones normalmente comienzan con la dispersión de manifestaciones por parte de la policía utilizando gas lacrimógeno y proyectiles de goma.
● Revisar dos veces las fuentes “oficiales”, ya sean del gobierno o fuerzas militares. Si no se proporciona evidencia ante un reporte, informen a sus lectores sobre esto al inicio de su historia. Además, tener cuidado en cómo se atribuyen declaraciones o reportes. Considerar la diferencia entre: “Dos sicarios palestinos que planeaban emboscar una minivan con ciudadanos israelitas murieron cuando fueron confrontados por la policía fronteriza de israelí, informó un vocero del gobierno de Israel”, y “Oficiales palestinos reportan que soldados israelíes constantemente ayudan a los colonizadores a retomar hogares que afirman que les pertenecen legalmente”. El primer ejemplo se lee como una declaración de hechos con una calificación al final. El segundo ejemplo se lee como una declaración que está a discusión.
● Entrevistar a palestinos. La historia siempre estará incompleta sin ellos. Ex diplomáticos estadounidenses, analistas militares israelíes y comentaristas de Oriente Medio que no son palestinos no reemplazan las voces palestinas.
● Ser conscientes de cómo se identifica a los palestinos. Preguntar a las personas que son entrevistadas cómo quieren que se les describa. Dentro de Israel, las respuestas probables pueden incluir árabe-israelí o israelí-árabe, ciudadano palestino de Israel o simplemente palestino. También, reconocer que los palestinos representan múltiples profesiones de fe que incluye musulmanes, cristianos y otros. Ignorar dicha diversidad perpetúa la noción engañosa que el conflicto es en esencia un conflicto religioso entre judíos y musulmanes, en vez de ser de naturaleza política.
● Hablar con sus empleados de Oriente Medio, del norte de África o descendencia árabe, especialmente aquellos a quienes la situación les afecta personalmente. Estén abiertos a los comentarios sobre la cobertura informativa del conflicto que hace su organización, sin poner excesiva presión sobre ellos. Reconocer que su conocimiento de la región y de la cultura puede ser de valor añadido para la cobertura informativa de su organización.
Acerca de la Asociación de Periodistas Árabes y del Medio Oriente (AMEJA): AMEJA es una organización profesional de periodistas dedicada a apoyar a una floreciente comunidad de periodistas de herencia árabe, del Medio Oriente y del norte de África, y a dar voz a las comunidades de las que proceden. AMEJA está registrada como una organización sin fines de lucro 501(c)3 en Estados Unidos, con miembros en varias partes del mundo. Para más información sobre la organización se puede visitar www.ameja.org.